ANTONI GAUDI: LA NATURALEZA Y LA GEOMETRIA COMO CAMINOS HACIA EL SEÑOR Almudena García Peña. Licenciada en Geografía e Historia. Cuando se contempla el firmamento de la Ciudad Condal, las torres de la Sagrada Familia ya nos anticipan el universo de Gaudí- el canto al Señor de un creyente innovador-. Observador atento, tomó su inspiración de la naturaleza del Camp de Tarragona. Las rocas, los animales, los ríos, los árboles, y todo aquello que se encontraba a su paso cuando realizaba sus paseos veraniegos por Riudoms. Todo este elenco de huertos, olivares, avellaneros fueron la base de sus “arquitecturas naturales” Desde la catequesis en piedra de sus fachadas, pasando por el cromatismo decorativo, el juego de la luz, nos adentra al interior de un templo en el cual un agradable “ bosque espiritual” nos invita al recogimiento y a la meditación. El proyecto recoge dieciocho torres .En cada una de las fachadas conectadas por cuatro campanarios,se encuentran las torres de los apóstoles. Dichas torres están rematadas por pináculos de mosaico veneciano, en las que de forma helicoidal se simbolizan a los obispos como continuadores de los apóstoles. De esta forma, cada pináculo contiene un anillo símbolo de la autoridad episcopal), un báculo, un cetro y una mitra. Arriba del mismo acabado en una cruz rodeada bolas blancas .En el crucero se levantará el cimborrio de Jesús sostenido por columnas de Porfirio. La torre de Jesús tendrá una altura de 170 m con una cruz de cuatro brazos, de los cuales saldrán haces de luz. La cruz superior alcanzará los 15 m de altura. Una torre más pequeña será la dedicada a María de 120 m de altura y cuatro más para los evangelistas, de 125m.Las tres fachadas se articulan en torno al Misterio Trinitario. La del Nacimiento llegó casi a ser finalizada por Gaudí, la de la Pasión- con esculturas de Subirachs-está casi terminada, mientras que la de la Gloria nada más que está comenzada. Ésta última constituirá la entrada principal.Las torres del campanario son de estructura parabólica con aberturas-tornavoces- que dirigen el sonido de las campanas a lo largo del templo. Por fuera el cromatismo de los tres “ Sanctus” se articula entre el amarillo dedicado al Padre, el rojo al Hijo y el color calabaza al Espíritu Santo. Si nos fijamos en la fachada del Nacimiento Observamos el gozo de la Noche de Navidad que quería plasmar. Las flores, los pájaros que vuelan en la piedra, las constelaciones, los picos de Montserrat muestran esta alegría. Se va a basar en los villancicos populares y en la tradición catalana, para alzar un gran “Nacimiento”. En línea ascendente articula la Encarnación de Jesucristo. En la puerta central se muestra la genealogía de Jesús, que en su base esconde la serpiente que muerde la manzana ( símbolo del pecado original). Articulada en tres pórticos, “De la Esperanza”, “ De la Caridad” y “ De la Fe”. En el Pórtico de la Esperanza y en el de la Caridad aparecen sendas tortugas en sus bases. Son Símbolo del cosmos, siendo la del lado de Collserola una tortuga de tierra mientras que la del lado opuesto es una de mar. En el Pórtico de la Esperanza se representa, de abajo a arriba, "La Huida a Egipto"," La Matanza de los Inocentes", "El Matrimonio de José y María y, finalmente, "La barca de San José"que representa a la Iglesia. De ella sale un pico que nos recuerda la serranía montserratina. En el de la Caridad, la estrella de Belén vertebra la fachada. Aparece "El Coro de los Ángeles", " La Anunciación", "El Nacimiento". En la parte de abajo, "La Adoración de los Reyes "y "La de los Pastores" a cada lado. Los ángeles que flanquean los pórticos son trompeteros, músicos y portadores de pan, vino o incienso pero, en ningún caso, son alados. En su punto más alto aparece el anagrama de Jesús JHS, rodeado de incienso, de ángeles, de un pelícano ( icono antiguo de la eucaristía, puesto que se pensaba que este animal se picaba el pecho para dar de comer a sus crías), unas escaleras apoyadas en un ciprés-imagen de la vida eterna- y éste lleno de palomas blancas, que simbolizan las almas de los creyentes. En su punto más alto aparece la Tau griega, la cruz de Jesús y la Paloma del Espíritu Santo. De esta forma resume de forma magistral el plan de Redención en el que el Nuevo Adán y la Nueva Eva son Jesús y María. Gracias a la Puerta de Jesucristo se llega al “ Árbol de la Vida”. En el Pórtico de la Fe, aparece la Visitación, la Presentación del Niño en el Templo. También aparece Jesús en la Carpintería con su padre, ante la mirada atenta de María. Encima, la Inmaculada Concepción sobre un foco de tres puntas que simboliza la Trinidad. Rematada por una mano que guía, con un ojo “ que todo lo ve” en su palma ( que simboliza la Divina Providencia). Los frutos de la tierra y el mundo animal están presentes en su creación. De esta manera en las agujas del ábside representó las hierbas silvestres de la zona, así como un despliegue de frutos( dones del Espíritu Santo) y los símbolo de la vid-trigo( Eucaristía). Los árboles: el ciprés representa la vida eterna, y los del interior: palmeras, plataneros, nos elevan al cielo, en un gran bosque espiritual Las tortugas son símbolo de la permanencia, en contraposición con el camaleón que supone el cambio .El mal universal está representado por todo tipo de reptiles, lagartijas, ranas caracoles que huyen hacia el inframundo. Las gárgolas malignas evacúan el agua por sus aberturas. En su interior la riqueza artística es inmensa. La planta del templo es de cruz latina, con tres naves. La longitud del templo es de 90 m. Desde esta medida se calcula la distancia entre las columnas de 7, 5 m. Las distancias de largo, ancho y alto son múltiplos de 7,5. La nave central une la tierra y el cielo. En dicha nave central aparece un espacio formado por un arbolado de 36 columnas que llevan el nombre de los evangelistas, los apóstoles o de algunas diócesis. En las columnas del transepto están representados San Marcos, con forma de León, Lucas de Toro, y Mateo de Ángel. Al mismo tiempo son focos que iluminan con luz natural. El bosque surge de un rio simbólico que atraviesa el centro de la nave y brota en el altar ( según el profeta Ezequiel). El recorrido de la Iglesia va desde la fachada de la Gloria, siguiendo a la izquierda aparece el Baptisterio, representado en una puerta. La puerta del Centro es la de la Eucaristía, abierta por el Papa Benedicto XVI, y que se dirige al altar. Continuando llegamos a la Puerta del Nacimiento( Misterio de la Encarnación). Desde el Altar, el presbiterio y el deambulatorio, llegamos a todos los Santos. Nos dirigimos a la fachada de la Pasión, Muerte y Resurrección. Y finalmente a la de la Gloria, donde Jesús es “Juez de Vivos y Muertos”. El maestro practicaba sus estructuras en modelos volumétricos con maquetas de yeso a escala. También recreaba los arcos, calculando sus cargas y sus pilares por medio de saquitos rellenos de perdigones, que unidos por cordeles reproducían una estructura invertida. El efecto del interior del Templo quería crear el bienestar y la acogida. Por eso, pensó en un inmenso bosque. Las columnas toman la forma de árboles que sujetan grandes copas, con tragaluces por donde se cuela la luz natural. También reproduce un gran despliegue de figuras geométricas: formas hiperboloides, paraboloides, conoides, helicoidales. Gaudí quería colocar figuras de Santos subiendo por las columnas, pero finalmente se optó por vidrieras laterales para no sobrecargar la decoración. Todas ellas son obra del maestro Joan Vila-Grau. Las inferiores toman colores intensos y formas marcadas, mientras que las superiores de la nave central son más translúcidas para dejar pasar una mayor luminosidad. La vidriera central de la fachada de la Pasión representa a un Cristo Crucificado, por otra parte, las de los laterales muestran a “ Jesús como Luz” y “ Jesús como Vida”. Entre las innovaciones de GAUDÍ están la columna dinámica. Su sección poligonal gira helicoidalmente en dos sentidos a lo largo del fuste. Cuando llegan a los 15 m, las columnas de la nave se subdividen a partir de un nudo que se inclina para soportar arcos de diferentes niveles. De esta forma se da una sensación de bosque y se distribuye el peso de la base. Asimismo, están las linternas del techo. Entres las columnas hay orificios y linternas de forma hiperboloide. La sensación es la de los rayos solares penetrando entre el arbolado. También las columnas inclinadas, que descansan el peso de la estructura al modo que lo haría una persona apoyada en un bastón. Se podrán decir muchísimas cosas más de este genial arquitecto, pero de lo que no cabe la menor duda es de que ha dejado un legado magnífico. Su profunda fe, su inquietud observadora junto a su afán innovador, son un continuo homenaje a la belleza y a la oración.

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