MIENTRAS QUEDA ESPERANZA

Ante las últimas noticias de cambio de gobierno, todos esperamos un ansiado cambio. Cambio para mejor, naturalmente. Pero, los viejos fantasmas siguen planeando ante nuestros ojos.

El problema territorial se cierne sobre nuestras cabezas como un àguila. Y es que los antiguos problemas, como el de Cataluña, lejos de solucionarse, se han agravado en los últimos tiempos.

Bien es cierto que todo el enredo de saqueo al que nos habían acostumbrado a los españoles, estaba minando y -de que manera- los cimientos del Estado. No obstante, el vuelco político en su inesperado surgimiento, ha dejado muchas lagunas en el horizonte.

Esperamos que este nuevo gobierno, con  un astronauta incluido, pueda ser de altos vuelos, en lo referente al desarrollo e impulso del I+ D.

Habida cuenta, que quedan por resolver muchas precariedades, como la del empleo temporal y de poca calidad, el cubrir la amplia franja de personas situadas en riesgo de exclusión social,el tema de los pensionistas,  así como el todavía difícil acceso a la vivienda, tanto de compra como de alquiler.

Ante la foto del nuevo Consejo de Ministros, todos nos deseamos los mejores augurios. Sin embargo, la desconfianza hacia unos y  otros, de cualquier signo político, sigue latente.  Ya sea desde la más rancia derecha, como desde la más nueva izquierda.  Y es que ambos, no dejan de mostrar que no están dispuestos a perder sus privilegios.

El ciudadano de a pié  se pregunta si todas sus necesidades van a ser escuchadas. Si ha llegado la ansiada hora de la resolución de sus problemas. Una inquietud, nada mal disimulada se aparca en el sentimiento de muchas personas. 

Y mientras tanto, cada uno tira de su carro. Unos de su casa, otros de su negocio, otros de su empleo, aferrándose como una lapa ante el incierto mañana.

Bien es verdad que se atisba un pequeño oasis en el desierto de las esperanzas. Mas aún es difícil para reconocer si las soluciones llegarán pronto.

De momento el panorama es del del  resurgimiento del PSOE ante un defenestrado M. Rajoy.

Ahora el Sr. Sánchez se enfrenta a una dura tarea, la de reconstruir los diferentes flancos abiertos: 

el del Estado de las Autonomías y la posible reforma territorial. También el de alentar políticas que lleven a una mejora de la maltrecha economía, así como el impulso de diferentes medidas encaminadas a una mejora social.( Ya que somos uno de los países europeos con menor cobertura social de toda su área), y no menos importante, una educación  de calidad .

Deseamos un nuevo " milagro" que nos haga dar punto y final a la crisis soportada durante estos últimos años. Al menos, que se construya el andamiaje necesario para llevarlo a cabo.